Las piezas de trabajo circulares pueden deformarse después del mecanizado debido a varias razones, como el enfriamiento desigual, las tensiones residuales y las técnicas de mecanizado inadecuadas.
Puede ocurrir un enfriamiento desigual cuando la pieza de trabajo no se enfría uniformemente después del mecanizado. Esto puede hacer que la superficie de la pieza de trabajo se contraiga a diferentes velocidades, lo que puede provocar deformaciones.

Las tensiones residuales también pueden causar deformaciones. Cuando se mecaniza una pieza de trabajo, se introducen tensiones en ella, lo que puede hacer que se deforme con el tiempo. Esto es más común en materiales como el acero, que tiene una alta tendencia a retener tensiones.
Las técnicas de mecanizado inadecuadas también pueden causar deformaciones. Por ejemplo, si la herramienta utilizada para mecanizar la pieza de trabajo no está alineada correctamente, puede crear una presión desigual en la superficie de la pieza de trabajo y provocar deformaciones.
Para evitar la deformación de las piezas de trabajo circulares después del mecanizado, es fundamental utilizar técnicas de mecanizado adecuadas, emplear técnicas de enfriamiento que aseguren un enfriamiento uniforme y reducir las tensiones residuales. También es necesario utilizar materiales de alta calidad que tengan baja tendencia a retener esfuerzos.

